Demi Lovato confesó que tiene miedo de caer en esta antigua adicción

Demi Lovato sigue luchando contra los efectos del trastorno bipolar que le fue diagnosticado hace más de cinco años y que, en su momento, la llevó a caer en una profunda depresión potenciada por su adicción al alcohol y las drogas.

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“A veces trabajo tanto en mi bienestar emocional, que se me olvida que soy bipolar, pero otros días me encuentro tan mal, que tengo que relajarme, llamar a la gente que me ayuda y hablar con mi terapeuta. Tengo que tomar mi medicación todos los días, y en algunos de ellos lo único que se me pasa por la cabeza es volver a beber. Afortunadamente la mayor parte del tiempo no pienso en ello y, en general, esa es la belleza de la vida, que hay que centrarse en cada día como si fuera el último”, reveló la cantante en la conferencia ‘Social Good Summit’.

Demi Lovato, que lleva cuatro años sin probar una gota de alcohol, también recordó que la clave para recuperarse fue tener a su disposición una serie de profesionales totalmente comprometidos con su situación y que no dudaban en poner límites a su comportamiento.

“[Durante mis años como estrella juvenil] Vivía en un mundo muy cómodo en el que estaba acostumbrada a que la gente me dijera que sí a todo, que me permitiera hacer lo que quisiera en todo momento por el estatus profesional que tenía. Cuando estuve ingresada, por primera vez alguien me dijo ‘no’, él me dijo ‘no’. Y así es como me di cuenta de que por fin había encontrado a alguien que de verdad se preocupaba por mí”, aseguró la cantante en referencia al doctor Mike Bayer, quien la atendió.

Demi Lovato publicó en su cuenta de Instagram una imagen de la conferencia. “Muchas gracias por tenernos a Mike Bayer y a mí en este evento, que contribuye a que se siga fomentando el debate en torno a la salud mental”, escribió la artista.

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Demi Lovato tuvo un increíble gesto con la clínica de rehabilitación CAST de Los Ángeles, donde estuvo internada en 2013 para lidiar con sus problemas de depresión, bulimia y adicción a las drogas, y ahora es dueña del lugar.

“¿Cuántos jóvenes de 24 años pueden decir que tienen su propia clínica? Que su influencia en el mundo de la música pop pueda servir también para hacer tanto bien es increíble”, confiesa el mánager de la cantante, Phil McIntyre, en el avance de la entrevista al programa ‘Sunday Morning’.

Por otro lado, al verse obligada a dejar los escenarios (según ella, porque padece de lupus), Selena Gomez dejó algunos pendientes, entre ellos su participación en el Global Citizen Festival 2016. No se podía dejar al público sin nada, así que de inmediato se le buscó un reemplazo.

Alguien que pudiese llenar el vacío que dejó Selena Gomez no iba a ser fácil, pero más temprano que tarde apareció un nombre. Ya todos la conocen muy bien: se trata de Demi Lovato, quien no dudó en aceptar la invitación.